“Háblate bonito”. Del dia que no me quise y cómo lo superé.

Háblate bonito, dicen. Y sí, es cierto, debes hacerlo, quererte por encima de todo, conocerte, respetarte, amarte incondicionalmente y darte ánimos. Has de hacerlo, hablarte bonito, confiar en ti, dejar a un lado la autoexigencia destructiva y la falta de autoestima. Lo sabes. Lo sé. Pero ¿cómo? ¿Cómo te hablas bonito si has aprendido a criticarte hasta el más mínimo detalle? ¿Cómo evitas machacarte a críticas si no sabes ver tus virtudes? ¿Cómo quererte cuando no encuentras más que faltas y defectos?

No tengo la fórmula. Honestamente hoy ha sido un día malo. Dentro de los altibajos del proceso de enamorarse de una misma, ha sido un día de bajos. De culpabilidades absurdas (si la teoría me la sé), de autimposiciones y expectativas ridículas, de imágenes distorsionadas… Y, por si te sirve en tu propio proceso, solo me ha servido enfrentarme a mí misma.

He seguido mirando esa foto en que me veía horrible hasta que he sido capaz de decir algo bonito sobre mí en esa foto. Sin peros. Sin puntos suspensivos. Y no la he borrado del carrete.

He dejado que mi hijo me fotografíe a su aire y la foto que ha considerado bonita la he guardado aún teniendo ganas de eliminarla.

He manuscrito todas las basuras que me rondaban por ridículas que sonaran. Les he dado el valor de la palabra y nada más sacarlas a la luz he podido dejar ir esos pensamientos que pesaban en mi mochila de reproches.

He leído mis miedos escritos y he podido racionalizar lo absurdos que son.

He llorado, una descarga. Y me he expresado, en voz alta. Y también he pedido perdón. Qué importante es saber dar las gracias y también pedir perdón.

Luego, frente al espejo, he pensado algo bonito. Me he pintado las uñas de los pies de rojo para salir de casa aunque no tuviera demasiadas ganas. Y finalmente, plantada frente al mar, he dejado que las olas me arrancaran todas las penas por los pies con su vaivén.

No tengo una fórmula mágica.
No siempre consigo ser positiva.
No siempre me quiero. A veces apenas me soporto.
Y sin embargo, la palabra escrita, el mar, los atardeceres, caminar, escribir y compartir desnudos estos pensamientos me guían hacia un nuevo día. Mejor. Sin duda. GRACIAS POR ESTAR.


3 respuestas a ““Háblate bonito”. Del dia que no me quise y cómo lo superé.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s