Hoy tengo un día de esos en que te miras torcido y eres tu peor crítico. Lo de ir al gimnasio a primera hora, sola, sin niños, me da demasiado tiempo para pensar sandeces mientras sigo como puedo las instrucciones de los monitores.
No puedo evitarlo, me miro en el espejo de la sala de pilates y solo veo una masa enorme moverse torpemente entre chicas jóvenes y estilizadas que lucen conjuntos perfectos y nunca, pero nunca, sudan.
No os preocupéis, sudar ya sudo yo, valgo por toda la clase. – ¿Sudas en pilates?
– Sí, mucho, imaginad en body combat O en fitness condition. No es agradable de ver.
Claro que yo no voy al gimnasio a lucirme, ya me gustaría. Os juro que a veces aquello parece una pasarela a las 7 y media de la mañana. ¡Vienen hasta maquilladas a entrenar! ¿Pero por Dios, a qué hora se levantan?
En fin, que hoy tengo un día de esos. De verdad que me lo paso bien y es un momento para mí, hago ejercicio, que es muy sano, y conozco gente interesante. Pero por mucho que dude mis kilos siguen ahí sin enterarse de nada, impertérritos a dietas y rutinas de sudoración masiva. Juro que morderé al próximo que ose decirme que después de años luchando contra el peso con mucho esfuerzo y dinero, lo que me hace falta es «dieta y deporte». Grrrrrrrrr.
En fin, que hoy tengo un día de esos que te miras torcida. Y como sé que no será el último, tendré que aguantarme a mí misma y seguir adelante con una sonrisa de medio lado. Y ya si eso, mañana seguimos sudando y nos queremos un poquito mejor.
Feliz jueves.
#derechoapataleta #vidadegimnasio #dietaeterna #dietaydeporte #quemuerdo