Ese período antes de las vacaciones escolares que ya hace calor y las tardes son infinitas.
Que apunta el verano, pero aún no.
Que planificas el perfecto Tetris familia – actividades – amigos.
Que haces números para nada porque nunca cuadran.
Que los deberes ya no apetecen y te tienes que pelear por la responsabilidad con un pre-pre-adolescente.
Ese período que empieza la jornada intensiva escolar para tres semanas escasas y ningún horario ni rutina te cuadra.
Ese período en que haces malabares y estás agotada pero toca seguir tirando del carro de la mal llamada conciliación -que son los padres y sus allegados-.
Ese período en que echas de menos los veranos de tres meses de la infancia.
En que te repites que nos lo hemos montado mal.
En que dejas de pensar imposibles y vuelves al Tetris de la conciliación, porque esta vez piensas ganar la partida.
Verano, ven a mí -con vacaciones, una playa y una hamaca bajo una palmera, si puede ser-.
¿Cómo va vuestro Tetris?
Hay que ser POSITIVO 