Mírame en detalle. Más allá de las espinas hay una flor abierta y un capullo aún temeroso que quiere asomar.
Quiéreme en detalle, que si te acercas suficiente no pincho y te regalo colores brillantes.
Tócame, en detalle. ¿No ves que hay algo más que aspereza o verdes apagados? Los mimos curan los miedos, prueba. Sólo prueba.
De cerca, donde se olvidan las corazas y nacen las confianzas.
Tú sólo quiéreme sin disfraces.
Donde las espinas pierden su sentido.
Donde las flores se atreven a abrir sus pétalos.
Tú sólo acércate suficiente, y mira, y escucha, y acaricia, y besa… Tú sólo quiéreme… En detalle.