Querido cuerpo: perdona si te miro mal. PD: te he comprado un bikini.

Perdona. A veces te miro mal. A veces me asalta la gordofobia aprendida. A veces no quiero mirar y cuando veo el reflejo no veo más que pliegues, curvas, líneas y formas que «no deberían estar ahí»… ¿Por salud, no es cierto?

Y sin embargo, després de tantos años, sigues ahí, cuerpo. Sigues sosteniendo, cogiendo, subiendo, bajando, agachando, bailando, saltando, andando, comiendo, cocinando, amando, atrayendo… Sigues ahí, no abandonas, aguantas malos días de autoimagen corporal y esperas días mejores en que te abrace con la mirada y seamos uno.

Los anuncios y las publicaciones con el «aún estás a tiempo de conseguir un cuerpo bikini«, con aplicaciones para contar pasos, hacer sentadillas, conseguir un culo «de infarto» o un estómago plano, las dietas milagro y las recetas se reproducen una y otra vez. Es difícil y cansado ignorarlo. Incluso al borde de los cuarenta y cinco y con el discurso cada vez más integrado contra la gordofobia, a favor de la diversidad corporal, por el respeto, contra el salutismo exacerbado y a favor de una nutrición saludable que incluya también el respeto por el propio cuerpo y el disfrutar de la comida sin culpabilidad.

No, este no es un post más de queja, en serio. Es una evolución. Es que he tenido varios días de mala autoimagen, de esa que hace sufrir inútilmente. Y sin embargo, hay una diferencia. Me he lanzado a reflexionar, he reconocido que esa mala mirada no debería estar, he silenciado las críticas todo lo que he podido y he buscado bikinis. Sí, de talla «grande». Y sí, pienso comprarlo para celebrar mis 45 años que llegan en tres dos uno. Pienso ponérmelo e ir directa a la playa. Y no, no prometo que todo vaya a ser color arcoiris, sé que la mala mirada me asaltará de nuevo, pero por lo menos no renunciaré a sentirme bien en mi piel.

Porque ya está bien.

Así que perdona, cuerpo, sé que sigo teniendo miradas torcidas. Pero también sé que te quiero como eres y por lo que eres, que todo esté autoodio se puede desaprender. Y ¿sabes qué? Te he comprado un bikini precioso. Ya verás. Celebraremos la vida juntos en unos días.

PD: Estoy pensando seriamente donar toda esa ropa que ya no nos va, dame tiempo #queridocuerpo


Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s