Ingenua de mí, pensaba que tras estar semanas rodeada de griposos y no haber sucumbido por fin mi sistema inmunitario me hacía un guiño en plan túsíquevalesbaby. Pero, craso error, cuando vas a mil por hora, si no paras tú, te para el cuerpo de una paliza interna. Tirada en el sofá, moqueando, con la cabeza taladrada y el cuerpo dolorido me he dicho que podía aprovechar de un día de tele para mí sola. Pero ratifico que la programación es una M… Será para que los ancianos y las amas de casa huyan despavoridos a la calle. En fin… Que he descubierto «Peak», una aplicación para entrenar en cerebro en agilidad mental, cálculo, capacidades como delegar o la capacidad de relajarse con mándalas.
Tras mi primer entrenamiento ha quedado claro que la aplicación quiere que me vuelva asidua a su entrenamiento porque tengo un mapa mental peor que el de un anciano de 70 años. Pero la aplicación me anima con un «tienes mucho margen de mejora» o «lo has hecho mejor que el 56% en esta categoría»… Está bien, estoy griposa, es mi primera vez y supero el 50 y a veces hasta el 70%. Quien no se conforma es porque no quiere. Y sí, me ha picado, voy a conseguir ser por lo menos igual que las mentes de mi edad, hombre ya!!!
Así que me he apuntado a esto de entrenar mi mente con Peak y no hay gripe que por mal no venga. He hecho unos mándalas monísimos 😉