Tener alacena, eso me hace muy feliz. Tan tonto y tan simple. Tener alacena y poder llenarla. (Si no pudiera llenarla la felicidad se tornaría angustia… Y hambre). Llenarla. De botes transparentes con pasta, arroz, legumbres y cereales del desayuno. Llenarla de latas de atún, botes de tomate, salsas, galletas… Tener alacena y poder llenarla, eso me hace muy feliz.
Qué suerte que tengo casa y que la casa tiene una alacena y que en la alacena he podido poner botes y botecitos que compré, y que gracias a que tenemos trabajos los botes están llenos de comida rica.
Qué suerte que la alacena se convierte en un cuarto de juegos secreto lleno de risas, porque tenemos niños y los niños son alegres y son alegres porque son felices y…
Es verdad, seguramente no se trata solo de suerte si no de trabajo, carácter, educación y circunstancias…
Hay que ver lo feliz que me hace tener una alacena.