Solo quedaron chocolates y besos.
Una taza descascarillada que se resistía a tirar.
Una tostadora vieja.
Notas de amor de otra vida.
Chapas, imanes, cajas y un montón de recuerdos.
Como los chocolates compartidos.
Y el beso.
Esta es una historia improvisada. Random, que dice la juventud hoy día.
No tiene nada que ver con esta famosa foto del beso.

No sabía cómo ligarla con el cuento del calcetín rojo de ayer.
Pero la creatividad era esto. Dejarse fluir. A ver qué sale. Sacarlo afuera. Y quizá tengamos algo.
Si tuvieras que escribir una historia de la foto y un calcetín rojo, ¿qué harías tú? ¿Crearías una historia triste o una con final feliz? ¿O quizá la felicidad y la tristeza están intrínsecamente ligadas como los besos de amor, el chocolate y los recuerdos apilados en cualquier rincón?
Pasen y vean.
No he sido yo. O sí. Pero la instigadora es @virginiamoll @agencialaindiscreta y su #advientocreativo