Hay días que cuesta salir de la cama. El calor, que ayer viste Juego de Tronos y te fuiste a dormir tarde, un ligero insomnio prevacacional… No ayuda. Y que por las mañanas eres poco más que un guiñapo con mucho sueño duermas lo que duermas, eso también. Tampoco tiene mucha solución más que respetar tus propios ritmos. Ir al lavabo con tranquilidad, ducharte, desayunar con parsimonia, y ya si eso, después del café empezar a sustituir gruñidos y monosílabos por una conversación ligera. Dar los buenos días, desear que vaya bien la jornada con un beso ligero y sentido.
Y cantar. En voz alta o por dentro. Como un preludio del Viernes Dando La Nota…
Hoooooy no me pueeeeedooooo leeeeeevaaaaantaaaaar…
Y lanzado el auto lamento, un autoánimo…
Venga, a por el día. A por un post ligero, que después de la confesión de ayer sobre tu vagina hoy estás más ligera y menos inspirada. Que hay días así, que tienes sueño, que razonas lento, que te hace falta espacio… Está bien, esos días los tenemos todos…
Y te levantas, avanzas, cantas… Mientras recuerdas Formentera. Mientras visualizas tu próximo destino de descanso. Tú puedes.
Esos día lo que me viene a la cabeza son canciones an tiguas… no se?? será nostalgia
Me gustaLe gusta a 1 persona
jajaja como se te nota la ilusión que te hacen esas vacaciones, disfruta de la felicidad!!!!🌼
Me gustaLe gusta a 1 persona
Aish, no lo sabes tú bien!!!!
Me gustaLe gusta a 1 persona