Ríete un poco de tí mismo, en compañía. Hacer el ridículo es divertido y sano (si lo haces siendo consciente, claro). Tú haz el ridículo y luego ríete un rato 😉
Ríete un poco de tí mismo, en compañía. Hacer el ridículo es divertido y sano (si lo haces siendo consciente, claro). Tú haz el ridículo y luego ríete un rato 😉