#yomequedoencasa: Día 1 – instalarse

Muy loco todo… El primer día en casa a cuatro. Yo he trabajado (cuando he podido instalarme y con alguna que otra interrupción) y mientras el padre de familia ha hecho su mejor versión de profe de paciencia limitada ante niños de remolonería y queja nivel Dios… Un poco de pases de fútbol en una calle vacía. Un poco de pelis. Un poco de consola aunque sea entre semana y porque a pesar de los morros han hecho deberes y leído lo pactado… No sé si sobreviviremos 15 días en cuarentena (o más, vete a saber) si no rebajamos el nivel de expectativas y exigencias… Estamos en proceso de adaptación. ¡Y eso que nos queremos, eh?

Pero… Lo importante es lo importante… Nos quedamos en casa por responsabilidad colectiva. Ni cumples, ni visitas de amigos, ni abuelos que se descuelgan que valgan (estos dos últimos puntos nos han costado más hoy, pero tras una crisis de criterios monumental, ya nos hemos puesto todos firmes, nadie dijo que sería fácil). Lo conseguiremos entre todos, ¡va!

#yomequedoencasa Seamos responsables y solidarios frente a la crisis del #coronavirus. Quedémonos trabajando, haciendo deberes, compartiendo pelis, cocinando bizcochos, haciendo juegos de mesa y tirándonos de los pelos en casa.   Los días sin cole y el teletrabajo no son vacaciones ninguna fiesta ni una excusa para ir de cañas o hacer cumples masivos ni para hacer esa escapadita de amigos a una casa rural.


Esto no es un simulacro ni un chiste malo ni una ocasión para hacerte el valiente. No es un «bah, yo ya tengo billetes de semana santa y me pienso ir igual, exagerados». Ni un «total, ya tengo las entradas».
Yo me quedo en casa. Porqué la situación de Italia es un espejo del futuro y no hace falta que vayamos siguiendo sus pasos. Que lo sé, que probablemente la gran mayoría pasemos por el #covid sin pena ni gloria con síntomas leves o ni eso. Pero no voy a arriesgarme a contribuir a que personas inmunodeprimidas, con problemas de salud o abuelos se vean luchando entre la vida tu la muerte por no saber aguantar a mis hijos un par de semanas en casa. No quiero contribuir a que el sistema sanitario se sature. Así que si confirmarse y tener sentido común pueden ayudar, vamos a por ello.
– Mamá, podremos ir a casa del vecino A y del amigo Z a jugar estos días, ¿no?
– No, cariño, por responsabilidad colectiva. – Pero nos quedaremos con los abuelos, ¿verdad?
– No, con papá y mamá, cada uno en su casa. Nos podemos llamar y pronto nos veremos, es mejor no arriesgarse, ¿no crees? – Es verdad, hoy la mitad de mi clase lloraba cuando han suspendido el cole porque tienen abuelos mayores y tienen miedo por ellos.


Sé que está situación es muy dura para muchos negocios que no podrán abrir y si lo hacen no tendrán asistencia: restaurantes, bares, peluquerías, comercios, gimnasios… Pero…
Seamos sensatos.
Seamos prudentes.
Seamos solidarios.
YO ME QUEDO EN CASA.

PD: Un poquito de porfavor con el papel de váter, gente. ¿Cuánto caga una familia en dos semanas? ¿Y si realmente estuvieras unos días sin papel, qué tal volver al bidé, a usar una esponja o una toalla humedecida y luego lavar? La histeria colectiva no hace bien a nadie.


Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s