Tú y tu lugar… Tu lugar de origen, tu lugar de infancia, tu lugar adoptado… Pueden coincidir o no, pero está claro que tienes un lugar en el mundo, uno en el que te sientes como en casa, en tu refugio, donde eres tú mismo sin limitaciones ni autocensuras.
Yo soy de Ibiza. Eivissa. Yabisa. Llámalo como quieras. De la Isla Blanca, en verano y en invierno, con fiesta o sin ella, con almendros en flor, pinos que huelen a pino, grillos, piedras y arena. Yo soy de isla y eso, viva donde viva, se nota. En mi ropa, en los colores, en las transparencias, en mi pelo, en mi sonrisa y mi caminar. Se nota en el amor desmedido al mar y la sal, al sonido de las olas, al azul marinero, a los reflejos del sol en la piel.
Yo soy de Ibiza y por lejos que vaya ese es mi lugar. Esa tierra pequeña y árida. Esa isla a veces maltratada, explotada de mala manera por gente que en realidad no son del lugar (hayan nacido en la isla o no) porque solo se preocupan por sacarle el máximo jugo posible a sus veranos o sus mares cueste lo que cueste.
Yo soy de isla. Y se nota en mis perezas y mis parsimonias, en mis tiempos y mis anhelos, en disfrutar de cosas tan cotidianas como una puesta de sol, en recargar pilas con días de playa y calor.
Tú eres tu lugar.
Tu lugar eres tú.
Y sabéis qué? Si amáis Ibiza, las Pitiusas, el Mediterráneo… Amad la posidónia. Esa que mantiene sus aguas azules. Las playas transparentes. La posidónia que protege peces, cultivos, animales, dunas… Dejadme que comparta esta maravilloso vídeo de Save Posidónia Project (donde puedes apadrinar un cachito para protegerla):
Yo, soy de Ibiza.
Y tú, dónde tiene tu alma y tu esencia el hogar?
Hay que ser POSITIVO 