Así somos y así salimos, sonriendo, haciendo el payaso, dejando que el tiempo pase por nosotros pero no por nuestras relaciones… «Qué suerte que en nuestra familia, a pesar de vivir lejos, nos vamos viendo y no somos unos extraños«, dice mi abuela. Y yo he pensado, «no es suerte, es gracias a ti, que eres nuestra bisagra desde siempre«. En vez de decirlo en voz alta la he abrazado. Debería habérselo dicho, además de abrazarla. Ahora el tiempo ya pasó, qué rabia que a veces nos callemos las reflexiones más importantes. Lo digo ahora públicamente, es gracias a ti, abuela, que sonreímos la familia unida. Te quiero. Mucho, como dice tu bisnieto de «Un par de dos».