Rompe las reglas, de vez en cuando. Las reglas se han hecho para romperlas, con sentido crítico, sin dañar a nadie. Experimenta. Piensa. Lanza lejos el Es que siempre se ha hecho así.
A mis hijos les chifla el break dance. Les encanta bailar. Les digo de apuntarles a danza, hip hop, y me sueltan «yo voy a aprender a bailar en la calle». Vaaaaaleeee, pienso, zas es toda la boca. Me fastidia que no quieran ir a clases de baile porque «es para las niñas», les pongo Billy Elliot, de vez en cuando insisto, pueden aprender y disfrutar mucho en clases de baile. Pero mientras, me tranquilizo, siguen bailando con pasión, aplaudiendo los break dancers de la calle, y me digo que la vida y la calle también son grandes academias. Así que bienvenida la ruptura con las normas establecidas, tanto si deciden aprender en la clase de chicas como si demuestran que a bailar se aprende bailando.
Lo esencial es que disfrutan bailando…
Feliz semana, rompedora!