La chica de los viernes apareció el día que le pusiste nombre. No es que antes no existiera, pero hay hechos que sólo son de verdad cuando les damos nombre. Ser chica de los viernes era pisar fuerte, sentirse poderosa, saber que podías con todo, confiar en los demás y creer en el poder de la ley de atracción, porqué no?
Ser chica de los viernes era ponerse guapa, un poco descarada, sentirse sexy, colgarse la sonrisa junto al rímel y sacar la minifalda. Pero no era sólo un ritual de belleza, lucimiento y seducción, eso era sólo la superficie… Nada mejor para empezar el fin de semana con buena energía.
Empezaste a decir «Buenos días, chica de los viernes», «Qué bien, hoy es viernes!», y se creó una rutina semanal. Yo me vestía para ti, tú me regalabas sonrisas pícaras y piropos que me alegraban el día. Aunque ese intercambio banal era en realidad una declaración de intenciones muy importante. Era un «hoy voy a poder con todo y es gracias a tu apoyo», un «me he acordado de ti y me gusta demostrarlo» y un «sé que puedes, sé que puedo» y un «me importas» lanzado desde tu mirada sonriente por encima de las gafas. Era un intercambio justo: las dos éramos felices para toda la semana y cada viernes reiniciábamos el ritual.
Aún hoy, años después, aunque ya no me veas, hay días que sacó a pasear la chica de los viernes. Me hace sentir bien sea el día de la semana que sea. Es como un guiño a nuestra amistad. Los años pasan y las carnes, ya se sabe, no son lo que eran. Pero no importa. Yo saco la minifalda y te envió energía positiva desde la altura de mis tacones. Porque tenga la edad que tenga, yo quiero seguir siendo tu chica de los viernes. Sentirme poderosa, entrar en el juego y disfrutar de él no tiene edad.
Sabes? En realidad has inaugurado una nueva tendencia que debería ser de obligado cumplimiento. Todo el mundo debería tener su chica de los viernes. Todo el mundo debería ser la chica de los viernes de alguien. Porque sentirse bien consigo mismo y que eso alegre el día a alguien no tiene precio. Dime, quieres ser mi chica de los viernes?
Una respuesta a “La chica de los viernes ”